Aquí tienes 5 razones por las que empezar a jugar al pádel:

1. Lo primero que debes saber es que se trata de un deporte que se puede jugar desde los 4 años hasta los 100 años de edad. Sí, sí… ¡Has oído bien! El pádel tiene una gran capacidad de adaptación y son los jugadores que están en una pista los que marcan el ritmo de un partido, la velocidad de la bola, la fuerza, la intensidad y la energía. Así que para este deporte la edad no es una excusa.
2. Seguramente una de las razones por las que si pruebas repites es porque el pádel es un deporte fácil de aprender. Desde el minuto uno todos los jugadores son capaces de pasar la bola al otro campo, incluso sin conocimientos técnicos. Si entras en una pista por primera vez te asombrarás de lo bien que lo haces, ¡Incluso si nunca habías practicado antes otros deportes! Eso sí, cuando lo pruebes solo querrás aprender más y más… Si te gustan los retos no te preocupes, es un deporte con mucho recorrido que te permitirá seguir superándote día tras día.
3. Es una actividad de deporte/ocio relativamente económica, por lo que todo el mundo puede practicarlo. Las clases no suelen ser caras y alquilar una pista (dependiendo del club) puede salir por menos de 3,00€ por persona una hora y media (¡1/3 menos de lo que cuesta ir al cine!). Una pala al principio es fácil que te la preste un familiar/amigo/el club donde juegues… Así que en este caso el dinero no es una excusa 😉
4. Es un deporte muy social. Cuatro jugadores por pista, una gran cantidad de gente que lo practica y su inevitable asociación con «el aperitivo de después» hacen del pádel un entorno simpático que hará que conozcas a mucha gente, hagas nuevos amigos y, por qué no… Que conozcas a tu media naranja 🙂
5. Al fin y al cabo el pádel es un deporte; y deporte es sinónimo de salud, tanto física como psicológica. El pádel te ayudará a mantenerte en forma, prevenir muchos tipos de enfermedades, perder esos kilos que a veces tenemos de más, quemar toxinas y… Seguramente lo más importante en esta época que vivimos es que actúa como terapia antiestrés y antidepresión.

¿Te hemos convencido con estas 5 razones? Lo mejor de todo es que hay muchas más… Pero queremos que tú las descubras 🙂 Así que ponte las zapatillas pide una pala prestada y… ¡A jugar!